lunes, 25 de julio de 2011

23 y 24 de Julio en Madrid: rompiendo viejos esquemas, trazando nuevos caminos.

Tras un mes de recorrido, las Marchas Populares Indignadas llegaron a Madrid este fin de semana. Largas horas de caminata que han culminado en varios días de convivencia y una gran manifestación.

La llegada a Vallekas
Cada columna se reunió en un barrio de Madrid, donde los anfitriones habían organizado el recibimiento, preparado actividades y montado las instalaciones necesarias para acoger a quienes venían caminando y también a los que llegaron en bus para pasar el fin de semana.
Las compañeras de Murcia llegaron al barrio de Vallecas el viernes 22 donde se juntaron con las de la Marcha Este, varios autobuses que llegaron desde Valencia y Murcia el 23, y las personas del propio barrio de Vallecas, quienes habían hecho el gran trabajo de dejar todo preparado para la recepción. Asambleas, música y mucho cariño fueron los ingredientes principales de este día.


Última caminata, objetivo: Sol
A las 18 del 23 de Junio comenzamos a organizar la salida desde Vallecas hasta Sol. Cuando ésta arrancó fuimos conscientes por primera vez de la cantidad de gente que éramos, grupos y grupos de personas salían sin parar del parque donde habíamos estado reunidos, pancartas y carteles, globos, pelotas gigantes, pitidos, megáfonos, canciones… Ocho kilómetros de marcha por Madrid marcada por un ambiente lúdico y festivo, ¡genial!

Overbooking en Sol
Al igual que la nuestra, el resto de Marchas también partieron desde los barrios hacia el centro de Madrid. ¿El resultado? La plaza de Sol se vio nuevamente desbordada por miles y miles de personas: las Marchas Murciana y del Este fueron recibidas con aplausos, canciones y vítores, abrazos y agradecimientos: un momento realmente emocionante.
La inmensa afluencia de gente impidió que se hiciese una asamblea al uso, y la mayoría de las murcianas nos dedicamos a descansar en Sol, entablar relaciones con otras marchas y ciudades, intercambiando opiniones y experiencias: como siempre, aprendiendo.


Paseo del Prado
Éste fue el lugar que la organización de Madrid preparó para acampar, un sitio precioso, en pleno centro de Madrid donde miles de personas nos juntamos para dormir. La mayoría queríamos descansar, pero lo cierto es que era tan estimulante estar rodeadas de personas con ganas de debatir, hablar, compartir música, que era difícil conciliar el sueño.
Finalmente, todas caímos: nos esperaba un largo día de domingo.


Domingo de asamblearismo y coordinación estatal
Desde bien temprano en la mañana el maravilloso entorno del retiro acogió a un montón de gente que, divida en grupos, realizó una puesta en común de la situación de las diferentes ciudades con respecto a propuestas, comunicación, internacional, iniciativas legales, acciones, etc.
Una de las conclusiones fue la importancia de mejorar y fortalecer la comunicación y coordinación estatal. Otra de las conclusiones: que el 15M saca lo mejor de las personas.



24-J: Manifestación
La salida, programada desde Atocha, ya vaticinaba una manifestación de afluencia masiva: las autoridades indican cerca de 36.000 personas, lo que pone de relieve que en realidad éramos muchísimas más. El recuento es difícil porque, desde el principio, la manifestación fue dividida en partes: en un primer momento iban llenos ambos lados del Paseo del Prado y, tras unirnos a la altura de Neptuno, nos volvimos a dividir, esta vez, en varios grupos por diferentes calles. Finalmente, todas llegamos a Sol.

Se oyeron todo tipo de consignas y de todo tipo de temática, cada cual más original que la anterior, aunque fueron las ya consagradas las que a más gente unieron en coro: “lo llaman democracia y no lo es”, “vuestra crisis no la pagamos”, “a, anti, anticapitalista” y “el pueblo unido jamás será vencido”.
También había banderas y pancartas de todo tipo lo que demuestra de nuevo que el 15M como movimiento no tiene etiquetas, pero acoge a todas las que quieran unirse, con respeto al consenso y a la multiplicidad. Asimismo es bonito señalar que, ante cualquier mínimo signo de gesto violento, quienes allí estábamos gritábamos “que no, que no, que no nos representan” dirigiéndonos a quienes lo habían llevado a cabo o intentado”.

Tras la manifestación un buen grupo de gente se desplazó hasta el Congreso, lugar que la policía nacional tenía cortado el acceso por varios lugares desde hacía días. Y así seguían cuando llegó la manifestación, por lo que las compañeras decidieron, como no podía ser mejor, hacer varias asambleas improvisadas allí en las mismas calles cortadas.



Y lo que queda…
Estos dos días han sido intensísimos, pero no acaban aquí. Desde esta mañana y hasta el 29, se convoca en el Retiro el I Foro Social, charlas, debates y asambleas acerca de temas fundamentales como educación o sanidad, así como una puesta en común de las propuestas que han ido recogiendo cada una de las marchas.